Históricamente, se ha representado al autismo con una pieza de rompecabezas. Desde 1963, este símbolo fue utilizado para identificar la condición pues la asociaban a “un enigma no resuelto” o al “no encajar” en el mundo neurotípico. Ahora, sabemos que el autismo es una condición que no debe ser resuelta; sino conocida, valorada y respetada. Es por esta razón que los colectivos autistas han decidido el lema “personas, no rompecabezas”.
Por otro lado, se utilizaba el color azul para representarlo pues eran varones los que en mayoría eran diagnosticados con esta condición. Esto ha cambiado, pues se sabe que existen mujeres con autismo y son cada vez más los casos detectados.
Actualmente son las propias personas neurodiversas quienes han tomado el control del activismo por sus propias causas y tienen como lema «nada sobre nosotros sin nosotros». Es por esto que también, surge el cambio en los símbolos y los colores que los representan, pues han decidido dar a respetar sus deseos y prioridades. Así, han elegido los símbolos del infinito con el color del arcoiris para representarse o el color oro (por sus siglas “Au” en la tabla periódica).
Aceptemos, respetemos y conozcamos más sobre el autismo
Para conocer más del autismo te recomendamos ver el siguiente video.
Blog del Departamento de Atención a la Diversidad (D.A.D)
